Es la diferencia entre los ingresos y los gastos de consumo de una persona o una familia. El ahorro ayuda a proteger el nivel de vida de las personas ante situaciones de pérdida de ingresos o posibles reducciones en el ingreso futuro, como la cesantía o ante el aumento imprevisto de los gastos, por ejemplo debido a una enfermedad. Además, el ahorro permite acceder a bienes que tienen un costo importante en relación con el ingreso personal o familiar, sin recurrir al endeudamiento.